Desde aquí deseo daros las gracias (Jara, Paula, David, Blanca, Patricia, Paula R., Ana, Laura Marcos, Pol, Marta, cristina, Alba, Ester, David P., Eduardo, Roberto, Patricia, Sara, Noelia, Paula G., Adrián, Santiago, Ignacio, Blanca, Marta, Alicia, Noemí) por hacer que lo que pensé que serían cinco días de trabajo intensivo se hayan convertido en cinco estupendos días rodeada de personas divertidas y excepcionales.
Creo que hablo por todos si digo que ha sido una experiencia inolvidable, vamos que…¡lo hemos pasado bien! Nada defrauda, ni el hermoso Palacio de Versalles con sus impresionantes jardines, ni París con sus 320 metros de torre Eiffel que sigue admirando a todo el que la visita, pateamos París al ritmo de Auri, Notre-Dame, El Louvre, los puentes de París, les Invalides, L´Arc de Triomphe, la Basílica del Sacré-Coeur, La Ópera …
Seguro que cada uno de vosotros tiene una anécdota que contar, algo que decir, que apuntar, hacedlo aquí y así convertiremos esta entrada en un testimonio múltiple de lo que fue la primera parte de este intercambio cultural, lingüístico, humano, al fin y al cabo.
